HOMBRO CONGELADO

Introducción

Técnicamente denominado capsulitis adhesiva u hombro congelado es una patología que causa dolor y rigidez en la articulación del hombro. Según va evolucionando con el tiempo, se genera mas dificultad para mover la mismo.

Afecta al 2% de la población en edades comprendidas entre los 40 y 60 años, siendo más frecuente en mujeres.

Se produce debido a que la cápsula que envuelve huesos, ligamentos y tendones, se endurece volviéndose más rígida y densa, disminuyendo la movilidad y produciendo adherencias en el tejido. En gran parte de los casos suele haber menos liquido sinovial en la articulación.

La sintomatología tiene un proceso que evoluciona en varias etapas, siendo la primera fase de dolor agudo y a medida que aumenta, disminuye el rango de movilidad. Suele durar de 6 semanas a 9 meses. En la segunda fase, permanece la rigidez que dura de 4 a 6 meses. La ultima fase en la que se empieza a recuperar la movilidad y fuerza de manera progresiva pudiendo llegar de 6 meses a 2 años.

Causas

Las causas son desconocidas, aunque hay varios factores que predisponen a poder padecer hombro congelado:

• Diabetes. Ocurre más en pacientes con esta enfermedad. Afecta del 10% al 20% de estas personas.
• Inmovilización. A veces puede aparecer después de haber estado inmovilizado tras una cirugía, fractura u otra lesión.
• Enfermedades asociadas como el hipertiroidismo, hipotiroidismo, enfermedad cardiaca, Parkinson, antecedentes familiares, accidente cerebro vascular.

El tratamiento, que dependiendo de la fase en la que se encuentre, suele ser duradero en el tiempo, llegando hasta los 3 años en los casos más severos. Hay que centrarse en controlar el dolor y restablecer el movimiento y la fuerza a través del ejercicio físico.

Mas del 90% de pacientes mejoran con el tratamiento conservador, tratando de modular el dolor y mejorar la movilidad, acompañado de medicación antiinflamatoria y en casos excepcionales se inyecta cortisona en la zona.

Se suele desaconsejar realizar movilizaciones bajo anestesia.

Es por ello, que la fisioterapia en fundamental en el tratamiento de cualquiera de las fases de esta patología, y mas en la fase inicial, en la que, con distintas estrategias de abordaje. Con terapia manual, con estiramientos, ejercicio terapéutico e incluso ondas de choque se controla el dolor y se fomenta la movilidad activa y pasiva, disminuyendo la inflamación y las adherencias, que permitirá restablecer la amplitud articular afectada.