MITOS SOBRE LA FISIOTERAPIA

La fisioterapia es una disciplina médica bastante joven y por ello hay ciertos mitos sobre la fisioterapia.  La fisioterapia es especializada y eficaz para tratar una amplia variedad de condiciones de salud. Sin embargo, a pesar de sus beneficios comprobados, existen muchos mitos y malentendidos sobre lo que hace un fisioterapeuta y cómo funciona el tratamiento. Estos mitos pueden generar dudas entre los pacientes e incluso hacer que algunos eviten buscar ayuda profesional cuando más lo necesitan.

Hoy queremos desmentir algunos de los mitos sobre la fisioterapia más comunes para que tengas la información correcta y puedas tomar decisiones informadas sobre tu salud.

Mito 1: La fisioterapia solo es para personas lesionadas

Este es uno de los mitos más comunes, pero está muy lejos de la realidad. La fisioterapia no solo se utiliza para tratar lesiones agudas o crónicas, sino que también juega un papel fundamental en la prevención. Muchas personas visitan a un fisioterapeuta para mejorar su postura, prevenir lesiones deportivas o aliviar tensiones musculares antes de que se conviertan en problemas graves. Además, la fisioterapia es eficaz para mejorar la movilidad y la función en personas que sufren de enfermedades crónicas, como la artritis, la fibromialgia o incluso la esclerosis múltiple.

Mito 2: Los fisioterapeutas solo dan masajes

Si bien los masajes terapéuticos son una de las herramientas que los fisioterapeutas pueden usar, el tratamiento de fisioterapia es mucho más que solo eso. Un fisioterapeuta utiliza una amplia gama de técnicas basadas en la ciencia y la evidencia. Esto incluye técnicas de movilización articular, ejercicios terapéuticos, electroterapia, técnicas de corrección postural y programas de rehabilitación personalizados. Además, la técnica que más aval tiene por la ciencia en la cura de patologías es el ejercicio. Cada tratamiento se adapta específicamente a las necesidades de cada paciente y tiene como objetivo restaurar la función, aliviar el dolor y mejorar la calidad de vida.

Mito 3: La fisioterapia es dolorosa

Es cierto que algunos tratamientos de fisioterapia pueden involucrar un poco de incomodidad. Sin embargo, la fisioterapia no tiene que ser dolorosa. El objetivo del fisioterapeuta es aliviar el dolor y restaurar la función de manera gradual y controlada. Durante las sesiones, siempre se busca el bienestar del paciente y se ajustan las técnicas y ejercicios según el nivel de comodidad del mismo. Si sientes dolor durante una sesión, es importante comunicarlo al fisioterapeuta para que ajuste el tratamiento.

Mito 4: Los fisioterapeutas solo trabajan con músculos

Aunque los fisioterapeutas se especializan en el tratamiento de músculos su campo de acción es mucho más amplio. Los fisioterapeutas también tratan problemas relacionados con articulaciones, tendones, ligamentos, el equilibrio, el sistema respiratorio, la salud del suelo pélvico e incluso la rehabilitación neurológica. Por ejemplo, los fisioterapeutas respiratorios pueden ayudar a pacientes con afecciones pulmonares, como el asma o EPOC, a mejorar su función respiratoria.

Mito 5: La fisioterapia solo se necesita después de una cirugía o una lesión grave

La fisioterapia es útil en todas las etapas de la recuperación, no solo después de una cirugía o una lesión grave. Muchos pacientes comienzan el tratamiento de fisioterapia antes de la cirugía para fortalecer los músculos, mejorar el rango de movimiento, aumentar la fuerza y reducir la inflamación. Esto puede acelerar la recuperación postquirúrgica. Incluso en casos de dolor crónico o disfunción muscular (como el dolor de espalda o el síndrome del túnel carpiano), la fisioterapia puede aliviar los síntomas y mejorar la función de manera significativa, sin necesidad de cirugía.

Mito 6: Si no hay dolor, no necesitas fisioterapia

La fisioterapia preventiva es una de las mejores maneras de evitar lesiones y problemas de salud a largo plazo. Muchas veces, las personas esperan hasta que el dolor se vuelve insoportable para buscar ayuda, pero la fisioterapia puede ayudarte a prevenir futuros problemas antes de que se presenten. Si experimentas rigidez, cansancio muscular, tensiones o molestias menores, es una buena idea consultar a un fisioterapeuta antes de que la situación empeore.

Mito 7: Los fisioterapeutas solo hacen terapia física manual, como masajes o estiramientos

Aunque las técnicas manuales son una parte importante de la fisioterapia, los fisioterapeutas utilizan una gran variedad de herramientas y enfoques para tratar a sus pacientes. Esto incluye el uso de tecnologías avanzadas como la TENS, EPI, PS, neuromodulación , termoterapia (calor o frío) y ejercicios terapéuticos. Estos tratamientos no solo abordan los síntomas, sino que también buscan corregir la causa subyacente de los problemas, ayudando a restaurar el movimiento y la funcionalidad de una manera más integral.

Mito 8: Una vez que empiezas la fisioterapia, tienes que continuar durante mucho tiempo

La fisioterapia está diseñada para ser efectiva en plazos razonables. Dependiendo de la condición, la fisioterapia puede requerir un tratamiento a corto plazo o continuo, pero siempre con el objetivo de que el paciente logre autonomía y recupere la funcionalidad lo antes posible. Si se siguen las indicaciones del fisioterapeuta y se realizan los ejercicios recomendados, muchos pacientes experimentan mejoras en poco tiempo. Los fisioterapeutas diseñan planes de tratamiento personalizados para ayudar a los pacientes a mejorar rápidamente y evitar tratamientos innecesarios a largo plazo.

La fisioterapia es una disciplina completa y multidisciplinaria que va mucho más allá de los conceptos erróneos que comúnmente circulan. Desde el tratamiento de lesiones hasta la prevención de problemas musculares y el alivio del dolor crónico, la fisioterapia tiene un papel fundamental en el bienestar de las personas de todas las edades y estilos de vida. Si tienes dudas sobre cómo puede ayudarte, lo mejor es acudir a un fisioterapeuta especializado para obtener una evaluación personalizada y un plan de tratamiento adecuado a tus necesidades. ¡No más mitos sobre la fisioterapia!